Antes de editar su siguiente trabajo de estudio, la banda publicó un álbum recopilatorio, Relics, que contenía varios sencillos y caras B junto con una canción original de Waters llamada «Biding My Time», grabada durante las sesiones de Ummagumma. El grupo contribuyó a la banda sonora de la película Zabriskie Point, aunque la mayoría de sus composiciones serían finalmente descartadas por el director del film, Michelangelo Antonioni.
"Relics" salió al mercado el 14 de mayo de 1970 en Reino Unido, y el 15 de julio en Estados Unidos, alcanzando el puesto 32 en las listas de ventas del Reino Unido, y el 153 en las de los Estados Unidos.
En una ocasión EMI Australia, editó el disco sin permiso de la banda, esto ocasionó que el disco fuera retirado del mercado, lo que lo convirtió una rareza. En 1996 se editó en disco compacto una versión remasterizada digitalmente.
El disco se ha editado con diferentes portadas, la tapa original consistía en un dibujo realizado por Nick Mason de lo que podría ser un barco compuesto por instrumentos musicales y otros objetos. En la edición remasterizada de 1996, se reelaboró la idea de este dibujo trasladándolo a las tres dimensiones. Dentro del libreto se pueden ver varias tomas de esta extraña figura.
Covers y multimedia
Más tarde la banda se puso en la composición de "Zabriskie Point", la banda sonora de la película del mismo nombre Zabriskie Point de Michelangelo Antonioni. La edición original se realizó el enero de 1970 y fue compuesta por varios artistas, entre ellos Pink Floyd.
Al final, solo tres temas son incluidos en la cinta, ya que Antonioni considera excesivamente inaccesible el material presentado por Waters y sus colegas. Las relaciones entre el grupo y el director son puro fuego cruzado. David Gilmour, decepcionado, declara que hubiese quedado mucho mejor de haber utilizado la mayor parte de nuestro material". The Grateful Dead , The Youngbloods, The Kaleidoscope, Jerry García, Roscoe Holcomb, John Fahey y Patti Page suplen con sus creaciones las "canciones malditas" de los Floyd, que son inmediatamente archivadas y, según cuentan las leyendas, recuperadas en los álbumes "The Dark Side Of The Moon" y "Wish You Were Here".
En 1997 fue reeditado incluyendo cuatro bonus tracks de Jerry García y Pink Floyd, que se utilizaron en la película, pero no fueron incluidos en la banda sonora.
Covers y multimedia
PELICULA ZABRISKIE POINT
SUBTITULADA EN
ESPAÑOL
Zabriskie Point es una película de 1970 dirigida por el italiano Michelangelo Antonioni, ampliamente remarcada en su momento debido a su situación en la contracultura del final los años 1960 en los Estados Unidos. Algunas escenas de la película fueron tomadas en Zabriskie Point, ubicado en el Valle de la Muerte.
Esta fue la segunda de las tres películas habladas en inglés, para las cuales Antonioni había sido contratado por el productor Carlo Ponti, y siendo estas posteriormente distribuidas por MGM. Las otras dos películas fueron "Blowup" y "The Passenger". Si bien años después de su estreno fue catalogada como película de culto, la película fue un gigantesco fracaso comercial y ampliamente descalificada por los críticos de la época. Zabriskie Point fue nombrada como uno "uno de los más extraordinarios desastres en la historia del cine moderno".
La película inicia con una escena en un formato similar al documental en la cual estudiantes blancos y negros discuten acerca de una inminente huelga. Mark (Mark Frechette) dice que "está dispuesto a morir" por la causa, lo que genera fuertes críticas de los estudiantes blancos. Luego de un arresto masivo en la protesta, Mark se dirige a la estación de policía con esperanzas de poder sacar a su compañero de cuarto de la cárcel bajo fianza. Los oficiales le dicen que debe esperar pacientemente, pero Mark termina dirigiéndose por si mismo a la zona de celdas. Una vez allí, pregunta reiteradamente acerca de la posibilidad de libertad condicional bajo fianza a los oficiales, al ser rechazada su petición, grita enloquecidamente a los estudiantes encerrados, con lo cual termina siendo arrestado. Difunde su nuevo nombre como Karl Marx, mientras que el oficial a cargo escribe erróneamente "Carl Marx". Una vez libre, Mark y uno de sus amigos obtienen armas de fuego de una armería de Los Ángeles, abogando que las necesitan para "defensa propia" y "proteger a nuestras mujeres".
En un edificio de oficinas de los suburbios de Los Ángeles, el exitoso ejecutivo de bienes raíces Lee Allen (Rod Taylor) revisa un anuncio de televisión de Sunny Dunes, un nuevo proyecto inmobiliario estilo resort que estaba siendo desarrollado en el desierto. En lugar de actores o modelos, el hábilmente producido anuncio obtenía maniquíes vestidos informalmente. En la escena siguiente, Allen habla con su socio (G. D. Spradlin) acerca del rápido crecimiento del área metropolitana de Los Ángeles mientras viajan a través del denso tráfico.
Mark se dirige a un sangriento enfrentamiento entre estudiantes y la policía. Algunos estudiantes son dispersados con gas lacrimógeno y al menos uno es herido de bala. Mark agarra un arma de su bota y uno de los agentes recibe un disparo, el cual resulta ser fatal, aunque no queda claro quién efectuó el mismo.1 Mark escapa del campus y toma un bus hacia Hawthorne donde, luego de un fallido intento de que le fien un sandwich en un negocio local, roba un pequeño avión y vuela hacia el desierto.
Mientras tanto, Daria (Daria Halprin), "una dulce adolescente fumadora de marihuana, con inclinaciones decentes"1 está conduciendo por el desierto en un Buick de los '50 para conocer a su jefe Lee, quien quizás sea también su amante. En el camino, Daria está buscando a un hombre que trabaje con chicos "emocionalmente alterados" de Los Ángeles. Ella encuentra a los chicos cerca de una hostería en el desierto de Mojave pero ellos la agarran violentamente, intentando abusar sexualmente de ella. Daria logra escapar en su auto. Mientras está llenando el radiador con agua, está siendo vista por Mark desde el aire, roza su auto y luego vuela a menos de 5 metros de ella, quien está obligada a tirarse al suelo debido a las bruscas maniobras de Mark. Luego, ellos se reúnen en una choza de un hombre mayor, donde Mark le pide prestado dinero a Daria para comprar combustible para el avión. Ambos luego se dirigen a Zabriskie Point y hacen el amor, mientras las formaciones geológicas del lugar parecen cobrar vida en una gran orgía de arena, elaborada por The Open Theater. Más adelante, un oficial de carretera de California interroga sospechosamente a Daria. Escondido detrás de un baño portátil, Mark apunta y casi dispara al oficial, pero Daria se para en el medio de ambos con el fin de bloquear el disparo, salvando la vida de alguna forma al oficial antes de que se alejase.
Volviendo al avión robado, lo pintan y decoran con eslóganes sarcásticos y colores psicodélicos. Daria le dice a Mark que le gustaría que viaje con ella y deje el avión, pero el cree que puede devolverlo sin consecuencias. Vuelve a Los Ángeles y aterriza en el aeropuerto en Hawthorne, mientras la policía y reporteros locales lo esperaban pacientemente. Varios patrulleros lo persiguen en la pista de aterrizaje. En vez de parar completamente, Mark intenta dar la vuelta por el pasto del costado de la pista y un oficial logra dispararle causándole una muerte instantánea. Pronto Daria se entera de la muerte de Mark anunciada en la radio que escuchaba en su auto, y se dirige a la casa de su jefe Lee, "un Berchtesgaden del desierto"1 plugo a lo alto de una colina de roca cerca de Phoenix, donde ella ve tres mujeres tomando sol y charlando en la piscina. Llora afligida por Mark, mientras se sumerge en la cascada arquitectónica de la casa.
Lee está muy inmerso en una reunión de negocios relacionada al riesgoso pero a la vez en expansión desarrollo de Sunny Dunes. Una vez que toma un descanso, recibe cálidamente a Daria. Ella baja las escaleras sola, se dirige al cuarto de huéspedes donde dormiría, y luego de abrir levemente la puerta del cuarto, la cierra nuevamente. Desde la visión del mayordomo en el hall de la residencia, Daria se marcha sin decir una palabra. Se sube al auto, conduce unos metros y mira la casa imaginando en llamas y explotando en mil pedazos.
Corazón, atomo, madre
Superado el ligero fiasco de "Zabriskie Point", el grupo se pone en manos a la obra con su nuevo proyecto, un álbum donde, a diferencia de "Ummagumma", el concepto de grupo como unidad se impondrá a los individualismos. Su título, "Atom Heart Mother", se refiere a una curiosa experiencia médica real, relacionada con la intervención de un corazón artificial –gracias a una pequeña pila atómica- en la recuperación de una mujer embarazada.
Y el grupo que da una vuelta de tuerca más a su carrera hacia la complejidad de formas. Utilizando más que nunca las posibilidades de la tecnología, los Pink Floyd construyen toda una experiencia sonora de grandes dimensiones y alto nivel de perfeccionismo formal. Aunque ciertas sutilezas han quedado en el camino en beneficio de un culto a la apisonadora sónica.
Con célebres nombres a su alrededor, como Alan Parsons de ingeniero de sonido o Storm Thorgerson, el alma de los diseñadores de portadas de Hipgnosis en el diseño, el grupo entra en Abbey Road para grabar un disco denso y complejo. Waters y Mason graban el bajo y la batería de los 23:44 del tema principal del disco de tirón, lo que se traduce en varios fallos de tempo. La orquestación se comienza a trabajar con Ron Geesin, pero abandona el proyecto a mitad grabación. Las canciones empiezan a no salir como se quiere, y de ahí al infinito.
En la época que Floyd grabó el album, en Abbey Road solo habian mesas de mezclas de 8 canales y grabar, por supuesto, era una tarea sumamente agotadora. Si hoy dia, con todas las posibilidades tecnológicas y digitales existentes todavia es una tarea díficil, hay que imaginar lo que era tratar de darle forma a un álbum como "Atom Heart Mother" hace cuarenta años atras.
La base musical de Atom Heart Mother, con bateria y bajo, fue grabada, como ya está dicho, en una sola toma por Nick y Roger, luego de haber ensayado hasta el cansancio cada una de las secciones del tema por separado y haber tocado en secuencia. Las guitarras y los teclados se agregaron por separado en otras sesiones. Pero cuando el tema estuvo terminado, los Floyd pensaron que una orquestacion y un coro podian resultar interesantes. Evidentemente estaban influenciados por el reciente "Concerto For Group And Orchestra" de Deep Purple, donde Blackmore, Gillan, Paice, Glover y Lord se despacharon con el primer encuentro entre el rock y la musica clasica, tocando junto a una orquesta de 110 musicos.
Debido a que siempre existe una diferencia de tempos entre los músicos clásicos y los músicos de rock, para lograr que la orquesta grabara en el tempo correcto, se tuvo que recurrir a monitores de estudio que sonaban a gran volumen a la par de la orquesta, lo que solo provocó que el sonido de los monitores volviera a entrar por los micrófonos que grababan haciendo todo un feedback. Milagrosamente, ese detalle no se nota en el producto final lo cual habla muy bien de los equipos y los ingenieros de sonido de Abbey Road, en este caso de Brian Humphries y Alan Parsons.
El coro de John Aldiss, dirigido por el propio Aldiss, fue mucho más amplio musicalmente, aceptando sin problemas cantar los arreglos hechos por Geesin. Durante generaciones muchas personas se han preguntado que es realmente lo que dicen esas voces. Basicamente no dicen nada, solo solamente sílabas dispuestas mas bien al azar, como si estuvieran solfeando. Eventualmente aparece alguna palabra por ahí, pero no tiene relacion con nada. Geesin basó su idea de los coros en ciertas referencias a cantos antiguos de tribus indigenas americanas, como los Incas, los Aztecas o los Mayas, lo cual tampoco quiere decir que utilzara palabras en alguna lengua muerta o cosa similar. Para nada.
Nos encontramos ante un gran disco mezcla de suerte, casualidad y fatalidad. El arte de portada, como siempre impresionante cuando hablamos de Hipgnosis, se reafirma en la huída del "space rock". Thorgerson se va al campo y fotografía la primera vaca que ve, con la casualidad de que la vaca le mira a él y así se compone una de las portadas más famosas de todos los tiempos.
Fue una casualidad y una suerte que su dueño no reclamara derechos sobre la imagen de la tapa o reditos ecónomicos por la misma. Otro factor que tuvo que ver con la foto de la portada fue el hecho de la asociación un poco indirecta al título. La maternidad, la leche materna, las vacas producen leche.... todo se relacionaba. Ademas, la imagen de la vaca era completamente extraña y desafiante para una banda de rock con cierto exito. De hecho, uno de los ejecutivos de EMI al ver la tapa fue muy directo con Storm: "¿Acaso te propones que esta empresa se vaya a la quiebra?",
Un disco a todas luces mastodóntico, bien producido, con momentos de exquisita brillantez, caótico y que marca la transición entre los dos estilos principales que han construido el universo pinkfloydiano. Masas corales, largas suites –la que da título al disco y ocupa toda su cara A- y aspecto de obra para iniciados... Sí, Pink Floyd y el mundo real comienzan a ser conceptos distantes, casi antagónicos.
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